lunes, 8 de diciembre de 2014

ANGUSTIA Y ANSIEDAD

En la terapia, una de las consultas más comunes de los usuarios es sobre angustia y ansiedad. Creo que no existe una sola persona que no haya experimentado esto en algún momento de su vida. Sin embargo, me gustaría aclarar algunas cosas para aquellas personas que sienten que experimentan esto con más frecuencia que el resto. A veces pueden llegar a pensar que algo anda mal con ellos, que pueden estar viviendo con algún trastorno del estado de ánimo, que tienen alguna patología y una amplia variedad de opciones que pueden asustar y es por esto que evitan buscar ayuda de un profesional, ya que podría corroborar su mayor temor. Se deberá realizar un análisis de varios factores para diagnosticar algo, intensidad, duración en el tiempo, síntomas que acompañan la angustia, niveles de concentración, rendimiento, etc y el único que puede hacer esto es un profesional capacitado.

En esta entrada, quiero darles un poco de información para que sea más fácil identificar una crisis de angustia sin agorafobia o más conocida como "ataque de pánico" y no asustarnos más de lo debido. También les explicaré un poquito sobre el trastorno de angustia con agorafobia y el trastorno de ansiedad generalizada.

Primero, aclarar que es la agorafobia, consiste en el miedo a las situaciones cuya evitación es difícil o podría dar vergüenza, de forma más simple, es tener miedo de sentir miedo.

La crisis de angustia sin agorafobia se refiere a una brusca aparición temporal y aislada de miedo y malestar intenso, esto viene acompañado por algunos de los siguientes síntomas:

  • Taquicardia
  • Sudoración
  • Temblores
  • Sensación de ahogo
  • Sensación de atoro o atragantarse
  • Opresión en el pecho
  • Nauseas o malestar abdominal
  • Mareos que pueden llegar a un desmayo
  • Desrealización (sensación de que no es real)
  • Despersonalización (sensación de estar fuera de uno mismo)
  • Miedo a perder el control y/o a la locura
  • Miedo a morir
  • Parestesias (sensación de hormigueo o adormecimiento de una o varias partes del cuerpo)
  • Variación de temperatura corporal (escalofríos o bochornos)
  • PARA QUE CALIFIQUE COMO CRISIS DE ANSIEDAD/ATAQUE DE PÁNICO DEBEN ESTAR PRESENTES AL MENOS 4 DE ESTOS SÍNTOMAS.

Hay que tener en cuenta que estas crisis no siempre tienen un detonador, algún evento o circunstancia que las haya provocado, pero si hay casos de personas que pueden presentar esto a raíz de un evento estresante una única vez en su vida.

Para diferenciar esto de un TRASTORNO DE ANSIEDAD CON AGORAFOBIA se tiene en cuenta los siguientes factores:


  • Se han presentado más de una crisis de angustia inesperadas
  • Después de una o más de estas crisis, por un tiempo no menor de 1 mes se ha presentado una extrema inquietud ante la posibilidad de tener otra crisis y/o preocupación extrema por las consecuencias de estas crisis y/o cambio de comportamiento muy significativo relacionado con las crisis
  • El profesional evaluará otros factores, como por ejemplo que estas crisis no puedan ser explicadas por algún factor externo, o tal vez por el consumo de alguna sustancia o tal vez por otra condición médica.
Y finalmente si ya queremos identificar un TRASTORNO DE ANSIEDAD GENERALIZADA
habrán otros criterios más a considerar. 
En este caso los síntomas deben estar presentes por al menos 6 meses en el individuo, haciendo que su funcionamiento normal se vea afectado. Debe cumplir los criterios anteriores. Presentará mayor irritabilidad, tensión muscular que pueda causar dolores constantes, fatiga, más cansancio de lo normal, la angustia o ansiedad no se limita a una sola cosa o tema, etc. 
Como vemos, es algo bastante más serio.

Como ya sabemos, todas las personas somos diferentes y tenemos distintas formas de manejar la angustia. Lo que para algunos puede ser generador de mucha angustia, puede que para otros no lo sea; es por esto que siempre recomiendo hacer una evaluación personal sobre como somos y como nos comportamos antes diferentes situaciones, tomarnos el tiempo necesario para conocernos a nosotros mismos antes de auto-diagnosticarnos sin las herramientas adecuadas y en caso de que alguna situación ya salga de su control, las puertas de la terapia siempre estarán abiertas.

Linda semana para todos!





miércoles, 3 de diciembre de 2014

EL OTRO LADO DEL MALTRATO - PERFIL DE UNA PERSONA MALTRATADA

Ya que la semana pasada se celebró el día de la ELIMINACIÓN DE LA VIOLENCIA CONTRA LA MUJER, esta semana les comentaré un poco sobre aquellas personas, no solamente mujeres, que son víctimas de violencia, sea de género o de cualquier otro tipo de violencia.

No existe un perfil rígido para estas personas ya que es algo que le puede pasar a todas las personas, estar en un situación en la que son víctimas de algún tipo de violencia, es por esto que no se puede identificar únicamente a los hombres como maltratadores y únicamente a las mujeres como maltratadas, sin embargo, las estadísticas muestran que la mayoría de casos de violencia de género que se denuncian son de mujeres. Hay que tomar en cuenta también que hay muchos hombres que viven esto pero son muy pocos los que realmente se atreven a denunciar, esto sucede por muchos factores culturales, sociales, personales, familiares, etc.

Hay características que comparten las personas maltratadas, veremos algunas a continuación:

  • En la mayoría de casos (aprox. 88%) fueron víctimas o testigos de maltrato, ya sea psicológico, físico o  sexual en sus familias de origen.
  • Esto hace que esté acostumbrada/o a relaciones donde tienen un patrón violento ya que es "normal" y están acostumbradas/os a esto.
  • Hay poca valoración hacia sí misma/o por causa de los malos tratos recibidos, cabe mencionar que el autoestima se comienza a formar en la infancia donde los principales forjadores son los padres, entonces si son estos los maltratadores, no se logrará desarrollar un nivel apropiado de autoestima.
  • En el caso de las mujeres, están acostumbradas a la sumisión ante el hombre, posiblemente en la infancia tuvo un padre autoritario y punitivo, además tuvo el ejemplo de un madre sumisa. Esto hace que en su desarrollo se arraiguen más las conductas de obediencia y sumisión ante el género masculino, lo cual inconscientemente la llevará a buscar a una pareja que encaje con un perfil más dominante.
  • Estas personas suelen tener un concepto de amor sacrificado y dependiente, el relaciones violentas la víctima da todo por el otro, es altruista y no tiene inconvenientes en hacer más esfuerzos y sacrificio por mantener la relación.
  • Están en constante búsqueda de aprobación de su pareja, esto es indicador de que no tienen autonomía, lo cual facilita al maltratador aprovecharse de su pareja porque son vistas/os como frágiles y dependientes, además prácticamente viven exclusivamente para hacer feliz al otro.
  • Así como el maltratador, la víctima también presenta una baja tolerancia al fracaso, sin embargo su motivación para esto es distinta, esto es promovido por el miedo y la vergüenza, propio también de la baja autoestima. Su visión de la situación es poco realista.
  • Suelen percibir el sufrimiento como un "reto" a superar, engañándose y llevándose a sí misma/o, a buscar convertir a su pareja en alguien nuevo e ideal a pesar de que esto signifique responsabilizarse de todos los problemas.
  • Es muy frecuente que presente sentimientos ambivalentes entre el amor y el odio hacia su pareja.
  • En el caso de las mujeres, se ven a sí mismas como en desventaja ante el hombre en todo aspecto, físico y psicológico, claro sentimiento de inferioridad. Esto las lleva a tener una conducta reservada y callada cuando la pareja está presente, para estar atentas a cualquier demanda o pedido. También tienen muy arraigado en sí mismas el mito de la importancia del rol masculino en la familia.
Las personas maltratadas se percibe a sí mismas sin posibilidad alguna de salir de la relación violenta, no confían en que podrán salir adelante solas, suelen ver a su pareja como algún tipo de Dios todopoderoso, además ven al mundo exterior como hostil y peligroso, el abuso emocional que ha vivido hace que no note las cosas buenas que hay y que podría tener ya que no cree merecerlas ni ´poder alcanzarlas, se perciben a sí mismas como incapaces, inútiles, tontas, suelen cuestionar su capacidad y posibilidad de ser queridas y aceptadas por otros.

El maltrato, al no ser continuo sino intermitente como se ve la imagen de la entrada anterior, entre castigo y refuerzo, crea una dependencia muy fuerte en quien lo sufre.

Específicamente en el caso de las mujeres, podemos distinguir 2 tipos según la crianza que han recibido:
  1. Las que han sido educadas con más responsabilidades de las adecuadas para su edad, caracterizadas por haber sido obligadas a darle todo a los demás (posiblemente hermanos, padres u otros familiares) y si algo fallaba es porque no lo hicieron lo suficientemente bien. Tienen mucha conciencia sobre sus deberes para con el otro.
  2. Las mujeres que han sido excesivamente protegidas durante su infancia, fueron educadas para ser dependientes de alguien "superior" que las proteja, por lo que buscan hombres que decidan por ellas y  las dominen, sin embargo ellas lo ven como alguien que las cuida.
No estoy buscando culpabilizar a las víctimas de la violencia que sufren, sin embargo si es bueno entender un poco más como funcionan ambas partes de una relación violenta para saber como manejarla en caso de que se nos presente. Saber también que lo indicado es denunciar cualquier violencia para evitar que siga creciendo y definitivamente entender que quien maltrata no lo hace por amor, sino todo lo contrario y definitivamente no se logrará cambiar al agresor si este no quiere hacerlo. Ese es un cambio que le toca a cada uno como individuo y la motivación tiene que ser interna para que también esté acompañada con la fuerza de voluntad para hacerlo.